El Bayern de Múnich sacó a relucir sus galones ante el Bayer Leverkusen y sumó un nuevo triunfo con una exhibición ofensiva liderada por un espectacular Douglas Costa. El brasileño asistió a Müller en el primer tanto del partido y llevó el peso ofensivo de un Bayern en el que el propio Müller y Robben marcaron los otros dos tantos de penalti.
Un resultado un tanto engañoso ante un Leverkusen que presentó más batalla de la que mostró el marcador del Allianz Arena al finalizar los 90 minutos. Los de Schmidt propusieron y neutralizaron el ataque de los de Guardiola en la primera media hora de juego. Tuvieron opciones de equilibrar el choque tras el primer tanto del campeón y sólo un tramo final de partido decepcionante les condenó a una derrota abultada.
El partido estaba espeso y sin ritmo hasta que apareció Douglas Costa. Un pase largo made in Xabi Alonso al costado izquierdo encontró al brasileño, que superó a su par en velocidad y sirvió un centro preciso para que Müller marcase a placer.
Poco después, el brasileño apareció de nuevo en una llegada al segundo palo- tras gran acción de Robben- en la que se encontró con el travesaño. Los de Schmidt, por su parte, volvieron a encontrar en las galopadas de Bellarabi y los golpeos de Calhanoglu sus mejores argumentos ofensivos. Precisamente el turco estrelló un libre directo con violencia en el larguero tras desviar ligeramente Neuer.
Neuer evita complicaciones
La incertidumbre se mantenía y el Bayern ofrecía cierta debilidad defensiva. En otro balón a la espalda de su primera línea, ya comenzada la segunda parte, Kiessling se encontró de nuevo con Neuer en el mano a mano.
La incertidumbre se mantenía y el Bayern ofrecía cierta debilidad defensiva. En otro balón a la espalda de su primera línea, ya comenzada la segunda parte, Kiessling se encontró de nuevo con Neuer en el mano a mano.
Encontraban oposición los de Guardiola hasta que Hilbert, en un día desafortunado, aclaró el panorama. Empujó a Vidal en un balón aéreo y permitió que Müller ampliase distancias desde los once metros. Poco después, otra acción inoportuna en defensa del Bayer dejaba que Robben echase el cierre al encuentro de nuevo desde el punto de penalti.
Destrozado anímicamente por las circunstancias, el Leverkusen se dejó ir y el Bayern pudo hacer sangre, pero le faltó la puntería de otras ocasiones. Echó en falta también al mejor Robben o la magia de Thiago pero en el Allianz ya tienen otra figura a la que venerar: Douglas Costa. Con él, los partidos son más divertidos y las victorias, más fáciles.