José Mourinho, actual entrenador del Chelsea. No escatima en elogios hacia el defensa madridista, que irrumpió en la escena internacional con el luso en el banquillo blanco y a día de hoy es, a ojos del propio Mourinho, el defensa central con mayor brillantez y proyección en el mundo.
Raphael Varane, defensa central del Real Madrid, se ha ganado a sus solo 20 años el corazón de uno de los mejores entrenadores del mundo, que ya le califica como la figura más destacada a seguir en el Mundial de Brasil 2014. "Creo que es el mejor central del mundo; de entre los jóvenes creo que es el mejor", afirma sin ningún tipo de complejo ni miramientos José Mourinho en su conversación con Yahoo, medio para en el que ejercerá de Embajador Global del Fútbol en 2014, año de imprescindible cita mundialista con los mejores jugadores y las selecciones más destacadas del planeta.
Ante una afirmación tan atrevida colocando a Varane como el mejor eje en una zaga en todo el planeta a pesar de su juventud, Mou se reafirma en su respuesta: "Ya, sí. Creo que es el mejor".
Una relación especial
En una temporada en la que ha salido de una delicada lesión que tiene que ir recuperando poco a poco, Raphael Varane estará, desde luego, orgulloso de ver cómo su trabajo ha convencido por completo al que fuera su entrenador en el año en el que debutó con la camiseta madridista tras llegar como un completo desconocido a cambio de 10 millones de euros que pagó elReal Madrid por hacerse con sus servicios. En la temporada de su debut, la 2011/12, el joven francés disputó un total de 15 encuentros marcando dos goles gracias a su buena proyección en ataque -es especialista en sacar el balón jugado y en llegadas a rematar acciones a balón parado-, pero su explosión definitiva llegó un año después, cuando llegó a sacar del once titular madridista a todo un jugador reputado como es el portugués Pepe.
“En Varane tenemos un central ‘top’ para los próximos 10 años”, dijo en su día Mourinho argumentando la decisión de sentar a su compatriota en el banquillo en beneficio del joven francés, que tiró la puerta del vestuario blanco sin ni siquiera tener que hacer más ruido que el que salía de sus botas, más bien música de un niño prodigio, al golpear un esférico.
A día de hoy Raphael Varane tiene prácticamente asegurada su presencia en el Mundial de Brasil 2014 si las lesiones no acaban jugándole una mala pasada. En la cita mundialista será cuando tenga que convencer al mundo, labor mucho más sencilla si se tiene en cuenta que ya se ha ganado al que es a día de hoy uno de los entrenadores con mejor palmarés de la historia del deporte rey.