El Oporto se impuso en Do Dragão al Nápoles de Rafa Benítez por 1-0 gracias a un gol de su delantero estrella Jackson Martínez. Este resultado compromete seriamente las opciones europeas de los partenopeos, que jugaron con Pepe Reina, Raúl Albiol, José Callejón y Gonzalo Higuaín en el once titular.
LA FICHA DEL PARTIDO
1. Oporto: Helton; Danilo, Maicon, Mangala, Alex Sandro; Defour (Herrera, 87’), Fernando, Carlos Eduardo (Quintero, 68’); Quaresma, Jackson y Varela (Ghilas, 72’).
0. Nápoles: Reina; Réveillère, Britos, Albiol, Ghoulam; Callejón (Pandev, 79’), Henrique, Inler, Insigne; Hamsik (Mertens, 74’) e Higuaín (Duván, 83’).
Gol: 1-0, Jackson (58’)
Árbitro: Pavel Královec (República Checa). Amonestó a Réveillère, Alex Sandro, Behrami.
Estadio: Do Dragão. 25.520 espectadores.
Mucho respeto mutuo hubo en la ida de la eliminatoria que enfrenta a Oporto y Nápoles en los octavos de final de la Europa League. Con la destitución de Vítor Fonseca aún fresca, los locales querían agradar a una afición que no llenó ni muchos menos las gradas del Estadio do Dragao. Los de Rafa Benítez, por su parte, mostraron excesivas reservas, conscientes de la ventaja que supone tener que jugar la vuelta en San Paolo, una vuelta que ahora será más empinada.
Con estas premisas, los primeros 45 minutos mostraron a un Oporto afilado que quiso poner en peligro la portería de Reina, pero el español solo tuvo que emplearse a fondo en una volea deJackson que lo exigió al máximo. Los portugueses pudieron irse con ventaja al descanso de no haber anulado el linier de Pavel Královec un tanto de Carlos Eduardo, que estaba bien posicionado.
Mucho más espectáculo hubo en la segunda parte, en la que Oporto y Nápoles se entregaron sin reservas al partido. Fernando puso a prueba nuevamente los reflejos de Reina, y un renacido Quaresma se quedó a centímetros de inaugurar el marcador, mientras Higuaín yCallejón respondían en el otro extremo del campo, también sin fortuna.
En un saque de esquina llegó el primer gol del partido, tras aprovechar Jackson un balón que cayó sin dueño justo donde él esperaba. ‘Cha Cha Cha’ no perdonó y con una nueva volea, esta vez sí, consiguió escuchar el sonido del balón golpeando las redes. El Nápoles más ofensivo del partido estaba entonces en apuros.
El Oporto supo entonces dormir el partido, contemporizar consciente de que el 1-0 le daba muchas papeletas para estar en cuartos de final, y a conservarlo se dedicó desde entonces, alejándose de la portería de Reina pero sin dejar que el Nápoles se acerca a Helton. Rafa Benítez introdujo en el campo a Mertens, su jugador más en forma, y Pandev en la recta final, buscando un desborde que Hamsik y Callejón hasta entonces no habían explotado al máximo.
Pudo ser aún mayor la herida para el Nápoles si Quintero llega a tener mejor fortuna en un rechace de Britos desde el suelo. El colombiano quiso estar al quite, pero al rebotar el balón en su cuerpo se fue directo hacia el palo derecho de Reina, que evitó una renta mayor para el Oporto. Cosas del fútbol, el joven Duván tuvo la posibilidad de cambiar totalmente el guión con un gol en el descuento, pero su remate defectuoso no terminó inquietando a Helton y deja al Nápoles en una situación comprometida en su periplo europeo.