El Manchester City derrotó de forma contundente al Manchester United en el Etihad con una goleada soberbia liderada por Agüero y Nasri. El equipo de David Moyes mostró un fútbol sin personalidad con el que no pudo hacer frente en ningún momento al de Manuel Pellegrini, mucho más serio y rodado.
Manuel Pellegrini no tuvo piedad ante la imagen que ofreció el Manchester United en el Etihad. David Moyes aún no ha dotado a los ‘red devils’ de una identidad propia y el equipo vagabundeó en el derbi sin pena ni gloria, a la espera de que el City eligiera el momento para golpearlo y dejarlo noqueado.
La batalla por el centro del campo ni siquiera llegó a existir.Fernandinho y Touré impusieron de forma impune su ley frente a Carrick y un desconocido Fellaini, apenas una sombra de lo que llegó a ser en el Everton. Así, la llegada de los goles era cuestión de minutos, dependiendo de la aparición definitiva de Nasri, cuya genialidad dio inicio al gol del ‘Kun’ Agüero pasado el cuarto de hora.
Un taconazo del guadianesco mediapunta francés habilitó a Kolarov en la banda para poner el balón en el corazón del área. Allí, el ‘Kun’ esperaba para meter la bota y desviar el esférico lo justo para que De Gea no tuviera opción, una vez más vendido ante una defensa que tiende a derretirse cuando más solidez se precisa.
El campeón, sin juego
La ausencia de juego por parte de los ‘red devils’ deparó niveles de posesión sonrojantes para el equipo de Moyes, y los ‘citizens’ gestionaron con toda tranquilidad el balón y los minutos, ante la desesperación de Rooney, impotente al ver cómo no encontraba ayuda en ninguna parcela del campo.
Antes del descanso llegó un nuevo mazazo, esta vez sangrante en lo defensivo, que supuso el segundo del Manchester City, obra de Touré. La desatención en la marca de Fellaini fue flagrante y la asistencia de Negredo con la cabeza no la desaprovechó el centrocampista costamarfileño, una vez más omnipresente en toda la zona ancha.
La segunda mitad no frenó la sangría, y Agüero volvió a aprovecharse de una combinación entre Nasri y un fajador Negredo para subir el 3-0 al marcador y terminar de aclarar el signo definitivo del partido. La goleada se convirtió en humillación pública del vecino poderoso con el cuarto gol, una cabalgada de Navas que nadie tuvo la decencia de intentar frenar entre los defensas del United. El centro al segundo palo llegó a Nasri, que no encontró oposición en Smalling y volvió a castigar a De Gea, desquiciado y buscando que el minuto 90 llegara pronto.
Relajación 'citizen'
Con cuatro goles de ventaja, el Manchester City levantó el pie del acelerador en los minutos siguientes, dejando que el United se rehiciera un poco y comenzara a jugar de forma más cómoda. Sus tímidos acercamientos, no obstante, no servían para inquietar la portería de Hart, que salvó con autoridad el escaso trabajo que tuvo. Con la relajación defensiva ‘skyblue’, Fellaini empezó a pisar el área rival, pero sin fortuna ante el gol, al igual que le sucedió a Rooney y Welbeck.
La situación permitió a Pellegrini hacer rotaciones en un partido en el que se hubiera esperado una mayor competitividad, pero en el que quedó claro que los ‘vecinos ruidosos’, bautismo que Alex Ferguson regaló al Manchester City, están varios niveles por encima del vigente campeón, a pesar del bello gol del honor que firmó Wayne Rooney de falta directa, el único ‘red devil’ que estuvo a la altura del escudo de su pecho.
LA FICHA DEL PARTIDO
Manchester City: Hart; Zabaleta, Kompany, Nastasic, Kolarov; Nasri, Fernandinho, Touré, Navas, Milner (71’); Agüero (García, 86’) y Negredo (Dzeko, 75’).
Manchester United: De Gea; Smalling, Ferdinand, Vidic, Evra; Carrick, Fellaini, Young (Cleverley, 52’), Valencia; Rooney y Welbeck.
Goles: 1-0, Agüero (16’); 2-0, Touré (45’+1’); 3-0, Agüero (47’); 4-0, Nasri (50’); 4-1, Rooney (87’)
Árbitro: Howard Webb. Amonestó a Nastasic, Rooney, Valencia.
Estadio: Etihad.
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