Claudio Bravo sedujo a Pep Guardiola por su habilidad con los pies. Lo cautivó tanto que eligió deshacerse de Joe Hart, el intocable arquero de Manchester City hasta esta temporada, y lo enamoró de manera tan profunda que no dudó en “sacárselo” a Barcelona, el club de sus amores. ¿Qué pensará el propio técnico catalán, en esta misma noche europea, tras el grave error del chileno en el Camp Nou?
El arquero del seleccionado chileno no falló en un centro del rival, no se equivocó descuidando el famoso “primer palo” o saliendo tarde para tapar un balón en un mano a mano: Claudio Bravo se equivocó con sus pies, justo con sus pies, la principal excusa por la que armó las maletas y se mudó a Inglaterra.
Encima, para su pesar, ya no tuvo revancha en el partido, debido a que fue expulsado en la misma jugada. Está claro: su rostro, yéndose del campo de juego, logra resumir cualquier párrafo y simplifica la explicación.