El Sevilla vencer al Atlético de Madrid por 1-0 en un partido muy disputado en el que los hispalenses presentan su candidatura a dar mucha guerra este año.
Sampaoli y Simeone no se guardaron nada y sacaron los que ahora mismo consideran sus mejores onces y ambos no regalaron una primera parte en la que no se pudo parpadear. Las hostilidades las abrió el Atleti con una falta desde la frontal muy buena para Griezmann pero que se estrelló en la barrera y los locales respondieron trenzando una buena jugada en la que Nasri le pegó muy mal.
El Sevilla tocaba y tocaba sin encontrar fisuras en el entramado de Simeone, ya que Carrasco y Correa se esforzaron como nunca en cerrar huecos. Vitolo trataba de tirar de su equipo por la izquierda pero finalizó su mejor acción con un piscinazo claro y después Oblak paró con facilidad un cabezazo de N’Zonzi. El Atleti cada vez que salía hacía mucho daño pero Correa y Gameiro no tuvieron el gatillo afinado cuando estaban solos ante Rico.
Simeone se arriesgó en el descanso dando entrada a Gaitán por Correa. El ex del Benfica dejó huecos al seguir a Vitolo y eso lo aprovechó el Sevilla para hacer méritos para el 1-0 pero el tiro de Nasri se estrelló en la madera y Oblak hizo una parada milagrosa ante Vitolo para mantener la igualada. El Cholo corrigió su error sacando del campo a Carrasco y reforzando la medular con Tiago.
Con el nuevo dibujo y Koke en la derecha, el Atleti tuvo más control y replicó a las ocasiones de su rival con un chut de Gameiro que se estrelló en el lateral de la red y otro de Filipe Luis que atajó Rico en dos tiempos. El duelo era una partida de ajedrez pero el Sevilla construyó un gol de la nada y en un saque de banda N’Zonzi ganó el cuero, tiró la pared con Vietto y acabó definiendo en el mano a mano ante Oblak.
El duelo se iba a poner aún más complicado para los colchoneros, ya que Koke no supo medir en una entrada innecesaria a Pareja y fue expulsado. El Sevilla pudo sentenciar a la contra pero Franco Vázquez disparó mal y el Atleti intentó aprovechar alguna jugada a balón parado para empatar pero Sergio Rico tapó con acierto un cabezazo de Godín. El Sevilla amarró la victoria, se colocó líder y ganó por primera vez a Simeone, su bestia negra.
