El Sporting de Gijón consiguió un meritorio empate ante el Sevilla, que desperdició su oportunidad de colocarse como líder de LaLiga Santander a pesar de que controló casi todo el partido.
El partido no se le pudo poner más de cara al equipo de Sampaoli cuando se adelantaron en el minuto 4 de partido. Un pelotazo largo de la zaga visitante, lo prolongó Ben Yedder para sacar un pase de oro para Vietto, que definió con mucha frialdad el mano a mano ante Cuéllar.
Todo parecía bajo control para los sevillistas pero en dos chispazos, el Sporting le dio la vuelta a la encuentro. Primero, Viguera indultó a Sergio Rico en el mano a mano pero después, Moi Gómez no tuvo piedad y su remate de primeras a un centro desde la izquierda se convirtió en un golazo imparable para Sergio Rico.
El 1-1 enloqueció el partido. Vázquez pudo hacer el segundo sevillista pero se encontró con la madera y Nasri cruzó en exceso a la hora de definir una jugada personal. Por su parte, Viguera volvió a indultar de manera increíble el gol cuando se encontró ante Sergio Rico.
Tras el descanso, el Sevilla se presentó sobre el césped sin el lesionado Nasri pero dispuesto a hacer el segundo gol que le diera los tres puntos. Los pupilos de Sampaoli monopolizaron el dominio, las ocasiones pero no el gol que les fue esquivo sobre todo en un remate de Iborra que se fue fuera y uno de Mercado que se estrelló nuevamente en la madera.
El Sporting supo guardar la ropa y sumó un punto importante para recuperar su autoestima y, de paso, bajar los humos a un Sevilla que empezó a notar la presión de ser señalado como un aspirante al título.